domingo, 17 de mayo de 2015

Miguel Hernandiez No quiso ser


    Ropas con su olor,
    paños con su aroma.
    Se alejó en su cuerpo,
    me dejó en sus ropas.
    Luchas sin calor,
    sábana de sombra.
    Se ausentó en su cuerpo.
    Se quedó en sus ropas.


    Negros ojos negros.
    El mundo se abría
    sobre sus pestañas
    de negras distancias.
    Dorada mirada.
    El mundo se cierra
    sobre sus pestañas
    lluviosas y negras.



    No quiso ser.

    No conoció el encuentro
    del hombre y la mujer.
    El amoroso vello
    no pudo florecer.
    Detuvo sus sentidos
    negándose a saber
    y descendieron diáfanos
    ante el amanecer.
    Vio turbio su mañana
    y se quedó en su ayer.

    No quiso ser.


    Tus ojos parecen
    agua removida.
    ¿Qué son?

    Tus ojos parecen
    el agua más turbia
    de tu corazón.
    ¿Qué fueron? ¿Qué son?